lunes, mayo 29, 2006

Negocios Universitarios ( Capítulo 1 )

En algún lugar de la ciudad, en una zona residencial, donde los jardines parecen pequeños bosques y esos grandes árboles crean una penumbra perfecta, una sombra que podría ocultar fácilmente a un ladrón o a alguna pareja con bajos recursos para pagar una habitación de un hotel, se encontraba estacionado un auto deportivo de color negro, tenía las luces apagadas, como si tratara de pasar desapercibido, las lunas polarizadas no dejaban ver quien se encontraba en el interior, solo una pequeña abertura dejaba escapar suavemente el humo de un cigarrillo.
Otro automóvil rompe el silencio de esa tranquila calle y se detiene justo detrás del auto deportivo, las luces brillaban por su ausencia, estaban apagadas. El vehículo era sencillo, tal vez para no llamar la atención, por qué lo que iba a suceder en ese momento no era para nada licito, ese tipo de operaciones estaban penadas por la ley. Luego de unos segundos de espera, se abre la puerta del auto negro, desciende un joven no mayor de veintitrés años de edad, de tez blanca, llevaba puesta una casaca, unos jeans desteñidos y calzaba unas zapatillas, se notaba que el vestuario que llevaba no era corriente. En la mano derecha sostenía un sobre y en la otra tenía un cigarrillo que fumaba desesperadamente. Lentamente mirando para todas las direcciones se dirigió al otro auto, que en el interior lo esperaba una mujer, también joven.

- “Ho-hola, tienes la mochila?”
- “Si acá está, dame la plata y lárgate rápido de aquí”
- “Pe-pero está todo completo?”
- “Sí baboso, ¡arráncate te he dicho!”

El muchacho cogió la mochila y fue corriendo a su automóvil, puso primera y se fue.

Su sudoración aumentaba, la radio sonaba muy alto, esa música electrónica ensordecería a cualquiera que estuviera en el auto, pisaba el acelerador a fondo, las calles estaban vacías, su casa no estaba lejos, solo tenía que llegar rápido teniendo mucho cuidado de que no lo siguieran.
El reloj marcaba las doce y cuarto de la noche, los semáforos ya no son respetados por nadie, el auto pasaba sin detenerse en ninguno de ellos. Solo faltaba una cuadra para que esa noche se desvanezca en los sueños de aquel joven. Faltando tres casas para llegar, el control remoto presionado rápidamente, le da la señal a la puerta del garaje para que comience a abrirse, rápidamente el vehículo ya estaba dentro, ahora ya estaba todo cerrado y oscuro.
Algo se estaba moviendo por ahí, las sombras parecían estar cobrando vida, pero el joven aun no lo había notado.

- “¡Baja mierda! Y saca la maleta “

El sobresalto impactante, hicieron que los latidos del joven se aceleraran de trescientos kilómetros por hora, el infarto estaba próximo, el dolor en el pecho era muy fuerte, sus manos instintivamente se dirigieron a la altura del corazón, sus ojos cerrados y los dientes apretados eran señal de sufrimiento.
De un solo jalón fue sacado del auto, siendo arrojado al suelo.

- “Parece que nos vas a ahorrar una bala”
- “¡¡Grrraaaaaaahhhhh!!”
- “Mejor te damos un tiro chibolo”

El silenciador de la pistola estaba sobre su frente. Un sonido seco sería el ultimo recuerdo de aquel muchacho.

6 Comments:

Blogger Laura Martillo said...

Interesante...Alguna malformación cardiáca? 23 años e infarto...interesante...

te leo Nomuerto.

11:37 a. m.  
Blogger Rolando Escaró said...

mielda... ¿que habia en la maleta?

11:57 a. m.  
Blogger novivo said...

Puro susto y un poco de droga. Es el primer capítulo de la historia...

11:58 a. m.  
Blogger Anita said...

Uf! con lo nerviosa que estoy después del robo aquí y ahora esto, me voy a tener que tomar un armonyl.

Gracias por la visita, te seguiré leyendo.

2:53 p. m.  
Blogger TORO SALVAJE said...

Lo mataste y nos dejaste con la duda.

Está muy bien.

Saludos.

6:38 a. m.  
Blogger Dragón del 96 said...

Un tartamudo muerto (parece ser que así fue), una maleta misteriosa, un auto dentro de un garage, me hace recordar mi fiesta de promoción. Tendré paciencia.

4:02 p. m.  

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